lunes, 3 de diciembre de 2007

5 - LA VIOLE CAMPEON y EL RENCUENTRO

Farola, sos el campeón.
Una vez mas me dejastes
el garguero hecho pedazos,
me hicistes dar mil abrazos,
me agrandaste el corazón.
Defensor vos sos, dos puntos:
quien me llena de emoción

Si habrá enormes personajes de apellido Lamas en la historia!... Por lo menos 5 calles de la Muy Fiel y Reconquistadora invocan ese apellido. Pero qué avenida, qué autopista habría que dedicarle a este pibe que no será ni el Lamas que peleó por Aparicio ni el otro de la paz de Octubre no será el Gran Lama de la montaña, este simplemente fue el purrete inconsciente que se olvidó que era back y corrió al área palermitana a ensartarles el gol del campeonato.

Fuistes el mas grande de todos Defensor, anduvistes todo el año dejando bien sentados los prestigios del fútbol-soccer oriental fuistes a los tórridos ecuadores, a los brasiles milenarios, dejastes arafue a colombianos, argentinos, paraguas...el Campeonatito Aperturita Uruguayito era papa para el loro, pero tenías que ganarlo a lo grande, con un gol en el minuto 46.

Después del partido me fui en pos de una birundela al viejo y querido bar Sporting de 21 y Obligado. Me quedaban un par de níqueles y algun que otro bronce, pero tenía que guardar para el bondi. El cheboli tiene dueños nuevos, así que no quise manguear. Pedí un Greson, un vaso de soda y me dediqué a ver pasar a la muchachada violácea que iba de festejo para el Franzini. Cada tanto levantaba el vaso saludando a alguno que me reconocía. Tranqui, ya no estoy para esos trotes, ir gritando dale campeón ni nada de eso, la violeta ya era campeón de antes, fue un trámite este campeonatito.

En eso estaba cuando la veo. Las luces de un 174 la iluminaron cuando apareció caminando en cámara lenta desde atrás de la proa que hacen 21 con bulevar. Paula! No puede ser! Me refregué los ojos para enfocarla mejor. Era ella! Me tomé medio farol de un trago, tiré las monedas arriba de la cármica y arranqué a seguirla. Caminaba ligero, recién me le puse a tiro cuando ya estaba por llegar a la facultá de arquitectura. Mi arrimada tenía que ser perfecta, el destino me la había puesto ahí, no podía desperdiciar la oportunidad. Cuando me faltaban 5 metros para alcanzarla me puse a silbar “Amante Corazón” y ya la tenía a un tris cuando cambié silbido por canto y entoné como pude:

Tus ojos de mora
tu boca de guinda
tan roja y tan linda
quisiera besar
tus negros cabellos
tu seno armonioso
erguido y airoso
con vida soñaaaar

Paulita ni bola. Se puso a subir las escaleras que dan al barrio jardín. Yo, que cantando no soy precísamente el mago, que además venía ronco de gritar los goles, que estaba bastante agitado por la carrera y para colmo la mocosa esta me pone a subir escaleras, seguía cantando el resto del estribillo...

Tu fragil silueta....hhhh...
...hhh... Tu rítmico pasoo
...de reina es acaso...
cautiva tu andar....hhhh...

Tanto el aire como la paciencia se me habían terminado “BUENO CHE, ME VAS A HACER CANTAR TODO EL VALS??!” Grité. Ella nada, así que la agarré de un brazo. La mina, que no había escuchado nada porque venía con los uókman puestos, se asustó y me dio tremendo empujón. Caí de tuje y me faltaron centímetros para rodar por la escalera para abajo. Ahí me miró y se dio cuenta quién era. Me ayudó a pararme y me pidió disculpas a tiempo que me puteaba.

-Peeero, que hacés acá viejo chotoo!! -me dice- Perdoná que te empujé pero pensé que me querías afanar!

-El corazón te quería afanar... ay!

Me dolía apoyar el pie así que Paula me ayudó a llegar hasta un banco para sentarme. Estábamos en esa plazoleta que hay frente a la casona que fue sede de los fachos de Tradición Familia y Propiedad. Lugar ideal para el arrumaco y el besuqueo, pero bueno, el tema ahora era mi lesión. Hasta ahí llega una calle en subida y por dicha calle de repente apareció un auto, creo que un chevrolé, no juno mucho las marcas de ahora. El auto paró y Paulita caminó hacia el, supuse que para pedir ayuda. El tipo debía ser millonario porque la ventanilla se bajaba sola, yo pensé que esas cosas solo pasaban en las de Ciencia Ficción. Despues de bastante charla se ve que se trataba de una persona era bien de bien porque la veo a Paula que viene hasta el banco y me dice que nos llevaban. Chasqueando los dientes y puteando entre ídems, me ayudó a meterme en el asiento de atrás y ella se sentó adelante con el dueño del auto que por dentro parecía la nave del orejudo aquel, el señor Espoc. No solo se subian y bajaban las ventanillas solas sino que tenía luces de todos colores por todos lados y la transistor meta chiquipun chiquipun. Adonde vivís? Me dice Paulita. Le contesté que vivía en Capurro, pero que no había problema, yo arrancaba para donde fuera, lo que quería era seguirla a la mina, obviamente. Ellos hablaban. El volumen de la cumbiamba estaba alto, pero algo de lo que se decían alcancé a escuchar:

-Eeeeeeeuu! -dijo el tipo- hasta Capurro hay que ir? Entonces habría que arreglar distinto! De acá a Capurro es un pedazo!

-No no no, -contestó Pau- ya quedamos que el oral si, pero hasta ahí nomás. Todo lo demás, hay que ponerse.

Yo parando la oreja. Pensé que quizas fueran compañeros de estudio preparando un exámen y el la habia pasado a buscar. Seguí escuchando:

-No seas mala! Bajame hasta un trecientos el completo y bueno... me fiás algun “Adicional”

-Adicional todo bien, dice Paula; pero no me pidas “aquello” porque vos sabés que no la doy, que te quede bien claro..!

-Pero me hacés ir hasta el culo del mundo a llevar a tu amigo.. Toda la nafta que voy a gastar, despues tenemos que volver hasta algun tel...

-No precisamos volver para el centro beibi, ahí en la bajadita del costado del parque Capurro, nos quedamos en el auto y te ahorras la nafta y la pieza..

¿Y esto? pensé Me parece que no hablan de estudios. Acá hay algo raro... El tipo insistió:

-Pero escuchame loquita, vos sabés que tarde o temprano vas a entregar... Aprovechá conmigo que ya me conocés..

-NO! No jodás mas con eso, ya te tengo dicho que no!

-Daaaaaale, despacito, no te preocupes que te trato b....

-La señorita le dijo que no, joven. –intervine- yo le agradezco la amabilidad de alcanzarme hasta el rioba y no sé de qué se trata su charla, pero creo que ella fue clara. En mi presencia cuando una dama dice no, es no.

Paula me hacía Shhh! El tipo dice:

De donde lo sacaste al coso este? –y se reía. De repente frena: - ¿Sabés qué? Se bajan los dos. Yo pago por lo que quiero y vos mi vida, estás mas dificil que la tabla del 17. Andá a hacerte dar por el viejo bichicome ese..

Viejo bichicome quien?? Y ya le pegué un saque a la butaca. La mina se bajó, abrió mi puerta y me sacó del auto agarrándome del brazo. Yo, rengueando lo invitaba a pelear al guacho, que aceleró, dio la vuelta en U arando y se fue por donde vinimos.

-La puta que te parió!!!! -me gritó Paulita- me hiciste perder un cliente!

-Cómo un cliente? Sos arquitecta?

-Lo que? Pero vos sos pelotudo o te hacés?? No ves que estoy trabajando viejo nabo?

Y yo, que tengo mas de medio siglo (largo) de carpeta, recién ahí entendí que Paula, MI Paula hacía la calle. Destino! Como permitistes que en mi cuore se clavara justo esta flecha? La vieja calle Uruguayana nos vio arrancar.. ella caminando despacio, cada tanto paraba para esperarme, la calle apenas iluminada de amarillo, como en una película que pasaron una vez, de un coboy rubio y un rengo enfermo. El 10 creo que la dio.